Francisco
Antonio Rísquez
Nace
en Juangriego (Edo. Nueva Esparta) el 10.10.1856 - Muere en Caracas el
10.7.1941
Médico cirujano.
Rector de la Universidad Central de Venezuela (1935-1936).
Fueron sus padres Jesús María Rísquez y Fernanda Alfonzo Boada. Inicia sus estudios en la
escuela de Bartolomé Milá de la Roca en
Cumaná, cursa su primer año de filosofía en el colegio de Andrés Level y
continúa en el que regentaba por ese entonces Rafael Villavicencio. En 1868,
viaja a Caracas, donde recibe la orientación del profesor de medicina doctor Gerónimo Eusebio Blanco en el
colegio Vargas. Para finalizar la secundaria, rinde exámenes en la Universidad Central de Venezuela en 1870 donde
obtiene su título de bachiller. Al año siguiente inicia sus estudios de medicina, y en 1872, ingresa como
docente en la escuela modelo Guzmán Blanco.
Tras recibir el doctorado en medicina y cirugía en 1876, se residencia en la isla de Margarita, donde ejerce su profesión médica conjuntamente con la docencia. A comienzos de 1877, pese a no haber cumplido todavía los 21 años, es elegido diputado a la Legislatura del estado. En 1881, funda en La Asunción el periódico El Esfuerzo. Al año siguiente, regresa a Caracas y fija su residencia en Petare, iniciando una actividad científica y cultural que se traduce en sus abundantes publicaciones, conferencias, discursos, necrologías, artículos literarios, que publicó en los diferentes órganos divulgativos de la época. En 1883, fue nombrado médico cirujano de Petare y vocal de la Junta de Instrucción Primaria de la sección Bolívar del estado Miranda. Separado de sus cargos en 1884, se marcha a Río Chico y regresa a Petare en 1886 a ejercer nuevamente su profesión. En 1887, es nombrado fiscal de Instrucción Pública.
En 1888, funda junto con el doctor José Manuel de los Ríos, la Clínica de Niños Pobres de Caracas, así como la revista del mismo nombre. En 1889, es encargado del vicerrectorado de la Universidad Central de Venezuela. Fundador y vocal del Consejo Supremo de la Cruz Roja Venezolana en 1895, viaja a Nueva York, México y Roma como delegado a reuniones científicas. Fundador de la Gaceta Médica, órgano de la Sociedad de Médicos y Cirujanos de Caracas (1893), se le encomienda en 1896, la redacción del Código de Instrucción Pública, así como la del Código Farmacéutico Nacional; en 1899, como concejal y director de Higiene, pone en vigencia la declaración obligatoria de las enfermedades contagiosas y la estadística demográfica. En 1901 es designado cónsul de Venezuela en Madrid, ciudad en la que vive durante 10 años. En España funda la Liga Antituberculosa de Málaga y envía a Caracas varios proyectos, entre ellos: Organización del cuerpo de Sanidad Militar, Higiene de la prostitución y Reforma a la clasificación de las enfermedades. A su regreso a Venezuela, en 1910, se reincorpora a la cátedra de Patología General en la Universidad Central y a la Comisión Permanente de Patología Médica en la Academia Nacional de Medicina de la cual había sido miembro fundador (1904). En 1911, es designado miembro de la comisión encargada de redactar la ponencia oficial sobre El paludismo en Venezuela y al plantearse la reorganización de la instrucción primaria y secundaria, es designado presidente de la respectiva comisión. Rísquez influyó en la creación de la Escuela de Enfermería, anexa a la de Artes y Oficios para mujeres, de la cual fue el primer director. En 1915, al ser cerrada la Universidad Central por el gobierno de Juan Vicente Gómez, propone la creación de una Escuela de Derecho, donde luego ocupa la cátedra de Medicina Legal. En 1916, la Academia Nacional de Medicina le elige su presidente para el período 1916-1918. Director de la Escuela de Medicina (1920), asume el cargo de rector de la Universidad Central de Venezuela (1935-1936). Por su producción bibliográfica Rísquez figura como individuo de número de la Academia Venezolana de la Lengua (1932).
Tras recibir el doctorado en medicina y cirugía en 1876, se residencia en la isla de Margarita, donde ejerce su profesión médica conjuntamente con la docencia. A comienzos de 1877, pese a no haber cumplido todavía los 21 años, es elegido diputado a la Legislatura del estado. En 1881, funda en La Asunción el periódico El Esfuerzo. Al año siguiente, regresa a Caracas y fija su residencia en Petare, iniciando una actividad científica y cultural que se traduce en sus abundantes publicaciones, conferencias, discursos, necrologías, artículos literarios, que publicó en los diferentes órganos divulgativos de la época. En 1883, fue nombrado médico cirujano de Petare y vocal de la Junta de Instrucción Primaria de la sección Bolívar del estado Miranda. Separado de sus cargos en 1884, se marcha a Río Chico y regresa a Petare en 1886 a ejercer nuevamente su profesión. En 1887, es nombrado fiscal de Instrucción Pública.
En 1888, funda junto con el doctor José Manuel de los Ríos, la Clínica de Niños Pobres de Caracas, así como la revista del mismo nombre. En 1889, es encargado del vicerrectorado de la Universidad Central de Venezuela. Fundador y vocal del Consejo Supremo de la Cruz Roja Venezolana en 1895, viaja a Nueva York, México y Roma como delegado a reuniones científicas. Fundador de la Gaceta Médica, órgano de la Sociedad de Médicos y Cirujanos de Caracas (1893), se le encomienda en 1896, la redacción del Código de Instrucción Pública, así como la del Código Farmacéutico Nacional; en 1899, como concejal y director de Higiene, pone en vigencia la declaración obligatoria de las enfermedades contagiosas y la estadística demográfica. En 1901 es designado cónsul de Venezuela en Madrid, ciudad en la que vive durante 10 años. En España funda la Liga Antituberculosa de Málaga y envía a Caracas varios proyectos, entre ellos: Organización del cuerpo de Sanidad Militar, Higiene de la prostitución y Reforma a la clasificación de las enfermedades. A su regreso a Venezuela, en 1910, se reincorpora a la cátedra de Patología General en la Universidad Central y a la Comisión Permanente de Patología Médica en la Academia Nacional de Medicina de la cual había sido miembro fundador (1904). En 1911, es designado miembro de la comisión encargada de redactar la ponencia oficial sobre El paludismo en Venezuela y al plantearse la reorganización de la instrucción primaria y secundaria, es designado presidente de la respectiva comisión. Rísquez influyó en la creación de la Escuela de Enfermería, anexa a la de Artes y Oficios para mujeres, de la cual fue el primer director. En 1915, al ser cerrada la Universidad Central por el gobierno de Juan Vicente Gómez, propone la creación de una Escuela de Derecho, donde luego ocupa la cátedra de Medicina Legal. En 1916, la Academia Nacional de Medicina le elige su presidente para el período 1916-1918. Director de la Escuela de Medicina (1920), asume el cargo de rector de la Universidad Central de Venezuela (1935-1936). Por su producción bibliográfica Rísquez figura como individuo de número de la Academia Venezolana de la Lengua (1932).
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